RESTAURANTE ENXEBRE (Santiago de Compostela)

Este fin de Semana he estado en Santiago de Compostela ganando el Jubileo como buen Gallego, y decidimos comer en el "Restaurante Enxebre" porque un amigo me lo recomendó, porque nos quedaba muy céntrico y porque tiene platos orientados a los niños.

Este restaurante esta situado en los bajos del Hostal de los Reyes Católicos, concretamente por la bajada hacia la calle huertas, y pertenece a este mismo hotel, su decoración es de estilo castellano antiguo, lo que lo hace muy acogedor, sobre el servicio tengo algunas cosas que decir, pero mejor hablo al final.

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En esta ocasión éramos nueve personas (niños incluidos), y llegamos a comer muy temprano con el objetivo de poder aprovechar el mediodía para acceder a visitar la Catedral, momento en el que hay menos gente. Cuando llegamos al restaurante no había ninguna mesa ocupada ya que acababa de abrir, por lo que la atención prestada por el personal es mejor. Este sitio tiene una carta fija y otra que varía en función de la temporada, en esta ocasión pedimos de entrantes, "Croquetas de Cacheiras" y "Setas a la plancha", y después como platos principales pidieron casi todos "Huevos Fritos con Zorza y Pimientos de Padrón", excepto dos personas que pedimos "Chipirones a la Plancha " y "Arroz caldoso de Callos de Bacalao", todo estaba muy bueno, muy abundante y os garantizo que la materia prima era de primera calidad, seguimos con los postres "Bolas de Helado de Chocolate", "Mouse de Chocolate con Castañas" y "Surtido de Quesos Gallegos con Membrillo", cafés y chupitos. Sobre la comida no hauy nada que objetar, a todos los que fuimos nos gustó mucho.

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He de decir que hemos comido muy bien, es un sitio que no es barato para lo que comimos pero asequible. Respecto a la atención he de decir que para ser un restaurante que pertenece al Hostal de los Reyes Católicos, deja mucho que desear, la comida una vez tomada nota, han tardado mas de cuarenta minutos en servirla, los platos principales no llegaron juntos (el arroz vino 10 minutos después del resto y por supuesto después de reclamarlo) y los camareros en ocasiones no ponían buena cara cuando se les llamaba. Quitando esto, es un sitio recomendable para cualquier persona que se encuentre de visita por la zona de la Catedral y no tenga prisa para comer.

Y como siempre digo, si alguno de nuestros lectores, ha ido o tiene pensado ir, nos gustaría que nos contase su experiencia, seguro que nos resulta interesante.